Diálogo de Fe Eucarística

Contenido

Los Himnos Eucarísticos 

Diálogo de Fe Eucarística

 

Fiesta del Corpus Christi de 1993

Queridos hermanos:

Con gran alegría celebramos hoy la Fiesta del Corpus Christi. Este día es ocasión para reafirmar nuestra fe eucarística y lo hacemos, entre otras cosas, con este diálogo:

I.

1. ¿Quién instituyó de modo inmediato el sacramento de la Eucaristía en la Ultima Cena?

El mismo Señor Jesucristo / instituyó el sacramento en la Ultima Cena, / después de comer la Pascua, / rodeado de los Apóstoles.

2. ¿Qué enseña la Liturgia?

Fue en la Ultima Cena-ágape fraterno-

tras comer la Pascua

según mandamiento,

con sus propias manos

repartió su cuerpo,

lo entregó a los doce

para su alimento.

In supremae nocte coenae

recumbens cum fratribus,

observata lege plene

cibis in legalibus,

cibum turbae duodenae

se dat suis manibus. (PL)

Hoy se recuerda la postrera cena en que Jesús, conforme al viejo rito,

se dignó repartir a sus hermanos

el cordero y los ácimos prescriptos.

Noctis recolitur coena novissima, qua Christus creditur agnum et azyma,

dedisse fratribus, iuxta legitima

priscis indulta patribus.

Una vez acabado aquel banquete y después de comido aquel cordero,

creemos que fue el mismo Jesucristo

quien se dio a todos, igualmente entero.

Post agnum typicum expletis epulis, Corpus dominicum datus discipulis

sic totum omnibus, quod totum singulis,

eius fatemur manibus. (SS)

3. ¿Cuál es la materia del sacramento?

La materia del sacramento / es el pan de trigo / y el vino de vid.

4. Por eso cantamos: 

La Palabra encarnada hace carne y cuerpo

con palabra suya

lo que fue pan nuestro.

Cambia en sangre el vino,

y aunque no entendemos,

basta fe si existe

corazón sincero.

Verbum caro panem verum verbo carnem efficit,

fitque sanguis Christi merum,

et, si sensus deficit,

ad firmandum cor sincerum

sola fides sufficit. (PL)

5. ¿Cuál es la forma de este sacramento?

La forma de la Eucaristía consiste / en solas las palabras de la consagración: / “Esto es mi Cuerpo” / y “Esta es mi Sangre” (o “Este es el cáliz de mi Sangre”).

Como a débiles les dio a comer su cuerpo, como a tristes les dio a beber su sangre,

diciendo: Recibid el cáliz que os entrego,

y bebed todos de él.

Dedit fragilibus corporis ferculum, dedit et tristibus sanguinis poculum,

dicens: Accipite quod trado vasculum,

omnes ex eo bibite. (SS)

6. Entonces ¿en cuántas especies se dio a los suyos?

Se nos dio bajo las dos especies / de pan y vino.

7. De aquí que digamos: 

Se dio a los suyos, bajo dos especies, en su carne y su sangre sacratísimas,

a fin de alimentar en cuerpo y alma

a cuantos este mundo habitan.

Quibus sub bina specie carnem dedit et sanguinem:

ut duplicis substantiae

totum cibaret hominem. (VS)

 II.

8. ¿Cómo está presente Nuestro Señor Jesucristo en la Eucaristía?

Nuestro Señor Jesucristo está / verdadera, real y sustancialmente presente / en el Santísimo Sacramento de la Eucaristía.

9. ¿Qué significan estos tres adverbios?

Contra los que dicen / que está de manera figurada / (como una estampa o una imagen) / se dice verdaderamente; / contra los que dicen / que está presente / porque así lo dice nuestra creencia, / se dice realmente; / contra los que se imaginan / que sólo está Cristo presente / por los efectos que produce, / se dice sustancialmente.

10. Por eso cantamos:

Y pues Él nos lo enseñara, consagremos sobre el ara,

hostia pura, vino y pan

para nuestra salvación.

Docti sacris institutis, panem, vinum in salutis

consecramus hostiam. (LS)

11. ¿Queda algo de la sustancia del pan y del vino luego de la consagración?

Luego de la consagración / sólo quedan las especies / -los signos- de pan y vino.

12. Por eso confesamos:

Bajo diversas especies, que son signos y no cosas,

se oculta en persona Dios.

Sub diversis speciebus, signis tantum et non rebus,

latent res eximiae. (LS)

13. ¿Qué obra la transustanciación?

En la consagración, / que es el momento central de la Misa, / ocurre la transustanciación, / o sea, la conversión / de toda la sustancia del pan en el Cuerpo de Cristo / y de toda la sustancia del vino / en la Sangre de Cristo.

14. Es la razón por la que proclama la Iglesia:

Para el cristiano es un dogma que el pan y el vino se tornan

carne y sangre del Señor.

Dogma datur christianis, quod in carnem tansit panis

et vinum in sanguinem. (LS)

Lo que el ojo no adivina, la fe firme lo ilumina

con divino resplandor.

Quod non capis, quod non vides, animosa firmat fides,

praeter rerum ordinem. (LS)

15. ¿Todo Cristo está contenido bajo la especie de pan y todo Cristo bajo la especie de vino?

Sí, / todo Cristo está presente bajo cada una de las especies.

16. Por eso:

Su carne bajo pan, su sangre bajo vino: pero entero permanece

Cristo en una y otra especie.

Caro cibus, sanguis potus: manet tamen Christus totus

Sub utraque specie. (LS)

17. ¿Está todo Cristo presente en cada especie y en cualquier parte de ellas?

Sí, / todo Cristo está presente en cualquier parte de las especies, / en la especie de pan aún antes de la consagración del vino / y después de la consagración del vino / está también todo presente bajo la especie del vino.

18. De ahí:

No lo parte el que lo toma ni lo rompe aunque lo coma:

íntegro a todos se da.

A sumente non concisus, non confractus, non divisus:

integer accipitur.

Lo come uno, mil lo comen: aunque infinitos lo tomen,

jamás lo consumirán.

Sumit unus, sumunt mille, quantum isti tantum ille:

nec sumptus consumitur.

Fraccionado el sacramento no vaciles, mas recuerda

que hay tanto bajo un fragmento

cuanto hubo en el todo ya.

Fracto demum sacramento, ne vacilles, sed memento

tantum esse sub fragmento

quantum toto tegitur. (LS)

III.

 

19. ¿De qué modo está Cristo en la Eucaristía?

Cristo existe en la Eucaristía con toda su cantidad dimensiva / ya que es un cuerpo vivo y orgánico / con extensión de partes en sí. / De lo contrario, / desaparecería el decoro, hermosura y armonía / con que resplandece en el cielo. Sólo está desprovisto / de la cantidad externa / o extensión local actual.

20. Por eso canta la Liturgia:

De la cosa no hay rotura,

sólo el signo se fractura:

ni en estado ni en altura,

lo signado disminuye.

Nulla rei fit scissura,

signi tantum fit fractura:

qua nec status nec statura

signati minuitur. (LS)

21. ¿La cantidad dimensiva del Cuerpo de Cristo está en la Eucaristía según el modo connatural de la cantidad?

De ninguna manera, / está a modo de sustancia, / que no tiene su cantidad extendida en el lugar, / sino que está toda en todo él / y toda en cada una de las partes, / semejante a la sustancia del agua / que está toda en cada gota / y toda en los inmensos océanos, / en las cumbres nevadas, / en la nubes imponentes.

22. Así cantamos: 

Te adoro con fervor, Deidad oculta,

que estás bajo estas formas escondida;

a Ti mi corazón se rinde entero

porque desfallece al contemplarte.

Adoro te devote, latens deitas

quae sub his figuris vere latitas;

tibi se cor meum totum subjicit,

quia te contemplans totum deficit. (AT)

 23. ¿Cómo permanecen los accidentes de pan y vino en la Eucaristía?

Los accidentes, especies o apariencias del pan y del vino / permanecen sin sujeto de inhesión / por virtud divina en el sacramento de la Eucaristía.

24. Por eso cantamos:

Se engaña en Ti la vista, el tacto, el gusto,

mas sólo por lo oído se cree con certeza;

cuanto el Hijo de Dios ha dicho, creo,

pues no hay verdad más cierta

que esta divina verdad.

Visus, tactus, gustus, in te falitur,

sed auditu solo tuto creditur

credo quidquid dixit Dei Filius;

nil hoc verbo Veritatis verius. (AT)

25. ¿Hasta cuándo dura la presencia de Cristo en la Eucaristía?

La presencia de Cristo en la Eucaristía / dura hasta que se corrompen las especies.

IV.

26. ¿Cómo sabemos que la Misa es verdadero y propio sacrificio?

Lo sabemos por la Sagrada Escritura, / los Santos Padres, / la Liturgia / y el Magisterio de la Iglesia.

27. ¿Qué dice la Sagrada Escritura?

Está profetizado el sacrificio de la Misa / por el profeta Malalquías que dice: / ¡Oh, quién de vosotros cerrará las puertas / para que no encendáis mi altar en vano! / No tengo ninguna complacencia en vosotros, / dice Yahvéh, / y no me es grata la oblación de vuestras manos. / Pues desde la salida del sol hasta su ocaso, / grande es mi Nombre entre las naciones, / y en todo lugar se ofrece a mi Nombre / un sacrificio de incienso / y una oblación pura. / Pues grande es mi Nombre entre las naciones, / dice Yahvéh (Ml 1,10-11).

28. ¿Qué predice Malaquías?

Malaquías predice un culto nuevo, / un culto entre los gentiles, / un culto en todo lugar, / un culto que reemplazará al levítico, / un culto puro / y un culto sacrificial.

29. Por eso se enseña:

En la mesa del nuevo Rey,

nueva Pascua y nueva Ley,

con lo antiguo han terminado.

In hac mensa novi Regis,

novum Pascha novae Legis

phase vetus terminat.

Lo nuevo a lo viejo ahuyenta,

la verdad la sombra afrenta,

la noche en luz se ha trocado.

Vetustamen novitas,

umbram fugar veritas,

noctem lux eliminat. (LS)

30. ¿Cuáles son las características del nuevo culto profetizado por Malaquías?

Esas características son: / universalidad absoluta de tiempos y lugares; / limpieza objetiva de la Víctima / que no puede ser manchada por los pecados de los oferentes; / excelencia insigne del nuevo culto / que dará gran gloria a Dios entre las naciones; / y será un sacrificio incruento. / Caracteres todos que convienen / sólo al sacrificio eucarístico/ y no a otro sacrificio.

31. De ahí que:

Adorad postrados este sacramento.

Cesa el viejo rito

se establece el nuevo.

Dudan los sentidos y al entendimiento

la fe lo sostenga

con su asentimiento.

Tantum ergo sacramentum

veneremur cernui,

et antiquum documentum

novo cedat ritui;

praestet fides supplementum

sensuum defectui. (PL)

32. ¿Hay en el Antiguo Testamento figuras del sacrificio de la Misa?

Sí, / entre otros basten dos ejemplos, / el sacrificio de Melquisedec / y el sacrificio del Cordero Pascual.

33. ¿Qué dice la Sagrada Escritura respecto de Melquisedec?

Dice: Entonces Melquisedec, / rey de Salem, / presentó pan y vino, / pues era sacerdote del Dios Altísimo (Gn 14,18); / Lo ha jurado Yahveh y no ha de retractarse: / Tú eres por siempre sacerdote / según el orden de Melquisedec (Sl 109,4); / De igual modo, / tampoco Cristo se apropió / la gloria del Sumo Sacerdocio, / sino que la tuvo de quien le dijo: / Hijo mío eres tú; / yo te he engendrado hoy. / Como también dice en otro lugar: / Tú eres sacerdote para siempre, / a semejanza de Melquisedec. (Heb 5,5‑6).

34. ¿Qué nos enseñan esos textos?

Que Melquisedec, / en su carácter de sacerdote, / ofreció a Dios/ un verdadero sacrificio en pan y vino, / y él fue, manifiestamente, / figura o tipo de Cristo, / sacerdote del sacrificio eucarístico / bajo las especies de pan y vino.

35. ¿Cómo se lo recuerda en la Santa Misa a Melquisedec?

En el Canon romano se dice: / “Mira con ojos de bondad / esta ofrenda / y acéptala como aceptaste… / la oblación pura / de tu sumo sacerdote Melquisedec”.

36. ¿Por qué el Cordero pascual fue la principal prefiguración en el Antiguo Testamento para que la fe de ellos se encaminase hacia el Redentor?

El Cordero pascual / es la principal figura del sacramento de la Eucaristía, / porque representa al mismo en todos sus aspectos.

37. Nos confortamos en nuestra peregrinación cantando:

El angélico pan se vuelve humano

y las figuras llegan a su término.

Panis angelicus fit panis hominum;

dat panis caelicus figuris terminum.

¡Oh maravilla! El pobre y el esclavo

comen el cuerpo de su propio dueño.

O res mirabilis! Manducat Dominum

pauper, servus et humilis. (SS)

38. ¿Cuáles son esos aspectos?

Tres cosas pueden considerarse en la Eucaristía:  /

1º) lo que es solamente sacramento, / o sea el signo exterior, / que es el pan y el vino; / en cuanto a esto / la principal figura / fue el sacrificio de Melquisedec, / que fue de pan y vino;/

2º) lo que es el signo y la cosa, / o sea, el Cuerpo y la Sangre de Cristo; / en esto fueron sus figuras / todos los sacrificios del Antiguo Testamento, / principalmente el sacrificio de expiación, / que era solemnísimo; /

3º) lo que es sólo cosa, / o sea el efecto de este sacramento, / que es la gracia santificante / y la gracia particular del sacramento; / su figura fue el maná, / que contenía en sí / todos los sabores (Sb 16,20), / así como la gracia de este sacramento / restaura y nutre el alma / de todas maneras / y en todas sus necesidades.

39. Por eso cantamos: 

Fue anunciado por figuras:

en Isaac inmolado,

en el cordero pascual sacrificado,

en el maná a los padres entregado.

In figuris praesignatur,

cum Isaac inmolatur,

agnus paschae deputatur

datur manna patribus. (LS)

40. Y sin embargo, ¿por qué el Cordero pascual es la principal figura?

Porque prefiguraba el sacrificio eucarístico / bajo esos tres aspectos: /

1º) se comía con panes ácimos (Ex 12,8); /

2º) se inmolaba por toda la multitud de los israelitas / en la decimocuarta luna, / lo cual fue figura de Cristo, / llamado Cordero a causa de su inocencia; /

3º) con la sangre del Cordero pascual / fueron protegidos los israelitas / del ángel exterminador / y sacados de la esclavitud de Egipto.

41. Así que cantamos: 

Pues recordamos el solemne día,

que la primera Eucaristía

el Señor instituyó.

Dies enim solemnis agitur

in qua mensae prima recolitur

huius institutio.

Buen Pastor, pan verdadero,

ten piedad del mundo entero,

nos defiendas y apacientes

y en la patria de la vida

poseamos todo bien.

Bone Pastor, panis vere,

Iesu, nostri miserere,

Tu nos pasce, nos tuere,

Tu nos bona fac videre

in terra viventium. (LS)

 V.

42. ¿Qué relación hay entre el sacrificio de la Misa y el sacrificio de la Cruz?

El sacrificio de la Misa / es representativo y conmemorativo / del sacrificio de la Cruz. / Cristo mismo manda / que aquello mismo que hizo en la Ultima Cena, / anticipando el sacrificio de la Cruz, / se repita a través de los tiempos / en memoria suya: / Haced esto en conmemoración mía (Lc 22,19; 1Cor 11,24), / palabras que indican / la índole objetiva / de esta oblación.

43. Decimos: 

Lo que Cristo hizo en la Cena,

hacerlo por siempre ordena,

para eterno memorial.

Quod in coena Christus gessit,

faciendum hoc expressit

in sui memoriam. (LS)

44. ¿Cuál es la Víctima que se ofrece?

La Víctima que se ofrece / en el sacrificio de la Misa / es el Cuerpo y la Sangre de Cristo / en cuanto derramada en la Pasión, / o sea, el mismo Cristo sufriente.

45. Exclamamos:

Oh memorial de la Pasión de Cristo

oh pan vivo que al hombre das la vida:

concede que de Ti viva mi alma,

y guste tus célicas delicias.

O memoriale mortis Domini,

Panis vivus, vitam praestans homini,

praesta meae menti de te vivere

et te illi semper dulce sapere. (AT)

46. ¿Cuál es la esencia del sacrificio de la Misa?

La esencia del sacrificio de la Misa / consiste en sola la consagración de las dos especies, / allí ocurre la inmolación sacramental, / maravillosamente apta para representar a Cristo inmolado, / es decir, separados su Cuerpo y su Sangre, / como lo estuvieron en la Cruz.

47. ¿Cuál es el sacerdote principal del sacrificio de la Misa?

Jesucristo / es el sacerdote principal del sacrificio de la Misa, / que con voluntad actual / quiere y ofrece todas y cada una de las Misas / que se celebran en la tierra.

48. ¿Es necesario el carácter sacerdotal conferido por el Orden Sagrado para celebrar este sacramento?

Sí, / todos y solos los sacerdotes debidamente ordenados / son ministros del sacrificio de la Misa.

49. Cantamos:

Así dejó instituido el sacrificio

y encomendó tan solo al sacerdote

celebrar el oficio respectivo

y distribuir el pan que él mismo come

Sic sacrificium istud instituit,

cuius officium committi voluit

solis presbyteris, quibus sic congruit,

ut sumant et dent ceteris. (SS)

50. ¿Cómo ofrecen los fieles el sacrificio de la Misa?

Al poner sobre el altar la Víctima divina, / el sacerdote la ofrece como oblación a Dios. / De esta oblación / deben participar los fieles de dos maneras: / Una, ofreciendo el sacrificio por medio del sacerdote; / y otra, ofreciéndolo juntamente con él, / porque con esta participación / el ofrecimiento hecho por el pueblo / pertenece también al culto litúrgico.

51¿Cuáles son los fines del sacrificio de la Misa?

Los fines del sacrificio de la Misa son cuatro: / primero latréutico, / porque tributa a Dios / homenaje de latría; segundo eucarístico, / porque da gracias a Dios / por los beneficios recibidos; / tercero propiciatorio, / porque tiende a aplacar a Dios / y expía nuestros pecados; / y cuarto impetratorio, / porque se ofrece pidiendo a Dios / lo que necesitamos.

52. Por eso reconocemos:

Hostia de salvación que abres las puertas

celestes de la gloria prometida:

fortalece y socorre a nuestras almas

asediadas por fuerzas enemigas.

O salutaris hostia,

quae caelis pandis ostium:

bella premunt hostilia,

da robur, fer auxilium

Glorificada eternamente sea

la perpetua Deidad, que es una y trina,

y que ella finalmente nos conceda

en la patria sin fin vida infinita.

Uni trinoque Domino

sit sempiterna gloria,

qui vitam sine termino

nobis donet in patria. (VS)

VI.

53. ¿Por qué razón deben los creyentes participar el día Domingo de la Santa Misa?

“La Iglesia, / desde la tradición apostólica / que tiene su origen el mismo día / de la resurrección de Cristo, / celebra el misterio pascual cada ocho días, / en el día que se llama con razón / ‘día del Señor’ o domingo” (SC 106). / El día de la Resurrección de Cristo / es a la vez el “primer día de la semana”, / memorial del primer día de la creación, / y el “octavo día” en que Cristo, / tras su “reposo” del gran Sabbat, / inaugura el Día “que hace el Señor”, / el “día que no conoce ocaso” (Liturgia bizantina). / El “banquete del Señor” es su centro, / porque es aquí donde toda la comunidad de los fieles / encuentra al Señor resucitado / que los invita a su banquete (cf Jn 21,12; Lc 24,30): /

“El día del Señor, / el día de la Resurrección, / el día de los cristianos, / es nuestro día. / Por eso es llamado día del Señor: / porque es en este día / cuando el Señor subió victorioso junto al Padre. / Si los paganos lo llaman día del Sol, / también lo hacemos con gusto; / porque hoy ha amanecido la luz del mundo, / hoy ha aparecido el sol de justicia / cuyos rayos traen la salvación” (San Jerónimo, pasch.)[1].

54. ¿Qué otras razones nos da el Catecismo de la Iglesia Católica?

“El domingo es el día por excelencia de la asamblea litúrgica, / en que los fieles / “deben reunirse para, / escuchando la palabra de Dios y participando en la Eucaristía, / recordar la pasión, / la resurrección y la gloria del Señor Jesús / y dar gracias a Dios, / que los “hizo renacer a la esperanza viva / por la resurrección de Jesucristo de entre los muertos” (SC 106): /

“Cuando meditamos, oh Cristo, / las maravillas que fueron realizadas / en este día del domingo / de tu santa Resurrección, decimos: / Bendito es el día del domingo, / porque en él tuvo comienzo la Creación… / la salvación del mundo… / la renovación del género humano… / en él el cielo y la tierra se regocijaron / y el universo entero quedó lleno de luz. / Bendito es el día del domingo, / porque en él fueron abiertas las puertas del paraíso / para que Adán y todos los desterrados / entraran en él sin temor” (Fanqith, Oficio siríaco de Antioquía, vol. 6, 1ª parte del verano, p. 193 b)[2].

55. ¿Qué nos manda el primer mandamiento de la Iglesia?

“El primer mandamiento/ (oír misa entera los domingos y fiestas de precepto) / exige a los fieles participar en la celebración eucarística, / en la que se reúne la comunidad cristiana, / el día en que conmemora la Resurrección del Señor, / y en aquellas principales fiestas litúrgicas / que conmemoran los misterios del Señor, / la Virgen María y los santos”[3]. / Estos días, llamados “días de precepto”, son: /

  1. Todos los domingos. /
  2. 1º de enero: / Octava de Navidad y Solemnidad de Santa María Madre de Dios. /
  3. 15 de agosto: / la Asunción de la Santísima Virgen María. /
  4. 8 de diciembre: / la Inmaculada Concepción de María. /
  5. 25 de diciembre: / Natividad del Señor. /
  1. ¿Hay que prepararse para recibir dignamente este sacramento de la comunión?

Sí, / hay que prepararse / y “quien tiene conciencia de estar en pecado mortal / debe recibir el sacramento de la Reconciliación / antes de acercarse a comulgar”[4].

57. Por eso se dice: 

Come el bueno y el perverso

mas el fruto es bien diverso:

de vida o de perdición.

Sumunt boni, sumunt mali:

sorte tamen inaequali,

vitae vel interitus.

Vida al bueno, al malo muerte:

mira cuán distinta suerte

da una misma comunión.

Mors est malis, vita bonis:

vide, paris sumptionis

quam sit dispar exitus. (LS)

 

58. De aquí que siempre debemos pedir la pureza del alma para recibir con más fruto la Eucaristía, diciendo:

Jesús mío, Pelícano piadoso,

con tu sangre mi pecho impuro limpia,

que de tal sangre una gotita puede

todo el mundo salvar de su malicia.

Pie Pellicane, Iesu Domine,

me inmundum munda tuo sanguine,

cuius una stilla salvum facere

totum mundum quit ab omni scelere. (AT)

59. ¿Qué anticipa el sacrificio eucarístico?

El sacrificio eucarístico / es un signo eficaz que anticipa, / es decir, preanuncia la gloria venidera. / “En los sacramentos de Cristo, / la Iglesia recibe ya las arras / de su herencia, / participa ya en la vida eterna, / aunque aguardando la feliz esperanza / y la manifestación de la gloria / del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo (Tt 2,13). /
El Espíritu y la Esposa dicen: / ¡Ven!… ¡Ven Señor Jesús! (Ap 22,17.20)”[5].

60. Por eso decimos: 

Tú que todo ves y cuidas

y aquí nos paces mortales,

haznos de ti comensales,

coherederos, compañeros

de tus santos en los cielos.

Tu qui cuncta scis el vales,

qui nos pascis hic mortales,

tuos ibi commensales,

coheredes et sodales

fac sanctorum civium. (LS)

 Queridos hermanos:

Doblemos siempre las rodillas adorando tan gran sacramento. Destaquémonos en nuestra participación en la Eucaristía todos los Domingos, y, de ser posible, durante la semana. Participando de las Horas Santas, Adoraciones nocturnas. Celebrando solem­nemente el Jueves Santo y el Corpus Christi. Ayudando a levantar templos que sean dignos cofres de la Eucaristía. Inscribiéndose en las Cofradías del Santísimo Sacramento, en fin, poniendo en práctica todo lo que el genio teológico y pastoral de los siglos pone a nuestra disposición para honrar dignamente a Jesucristo sacramentado.

Que la lengua humana

cante este misterio,

la preciosa sangre

y el precioso cuerpo.

Quien nació de Virgen

Rey del universo,

por salvar al mundo

dio su cuerpo en precio.

Pange, lingua, gloriosi

corporis mysterium,

sanguinisque pretiosi,

quem in mundi pretium

fructus ventris generosi

Rex effudit gentium

Himnos de alabanza, bendición y obsequio;

por igual la gloria y el poder y el reino

al eterno Padre

con el Hijo eterno

y el divino Espíritu

que procede de ambos. Amén.

Genitori Genitoque

laus et iubilatio

salus, honor, virtus quoque

sit et bendictio;

procedenti ab utroque

compar sit laudatio. Amén. (PL)

Abreviaturas:

PL Himno “Pangue lingua”

LS Secuencia “Lauda Sion”

SS Himno “Sacris solemnis”

AT Himno “Adoro te”

VS Himno “Verbum Supernum”

Todos ellos compuestos por Santo Tomás de Aquino.

[1] Catecismo de la Iglesia Católica, 1166.

[2] Ibidem, 1167.

[3] Ibidem, 2042.

[4] Ibidem, 1385.

[5] Ibidem, 1130.

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